Landair dirigió al equipo de planificación maestra para determinar la viabilidad de remodelar la más grande parcela de propiedad privada ribereña de Newark y convertirla en un nuevo distrito de uso mixto que contará con más de 1500 unidades residenciales, espacios de arte y entretenimiento, cafés, acceso a paseo costero y servicios públicos, y edificios de uso comercial y hotelero. El sitio actualmente alberga instalaciones de depósito.

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Landair preparó un análisis detallado de las propiedades bajo control y desarrolló una estrategia de adquisición agresiva para este inversor privado; descubrió la geografía económica de la región e identificó las influencias clave para la toma de decisiones. Luego, la firma trabajó estrechamente con el propietario, los funcionarios de la ciudad y los expertos locales para establecer una hoja de ruta de aprobaciones e identificar posibles fuentes de financiamiento. Desde entonces, fue aprobada la reclasificación del sitio.